Un estudio realizado por investigadores de la Universidad Ben-Gurión del Néguev, Israel, ha revelado algunos secretos del funcionamiento de la mentira, de cómo, cuándo y por qué mentimos.
Para descifrar este misterio de la mente humana, los científicos realizaron un experimento: a los voluntarios, que desconocían el propósito del mismo, les mostraron, en una pantalla digital, imágenes de dados con diferentes cantidades de puntos; luego les pidieron que dijeran el número de puntos del dado que se encontraba más cerca del centro de la pantalla.
Cuanto mayor era el número, más dinero recibía el participante. ¿Cuándo mentían los voluntarios? Cuando el número de puntos en el dado situado al lado del "correcto" era mayor que en el central.
De lo que se desprende, según el artículo publicado por la revista Psychological Science, que los participantes mintieron porque podrían justificarse aduciendo un error, provocado por la falta de atención. ¿Y su respuesta no puede haberse debido a un genuino error, en lugar de una mentira?
No: los científicos registraron los movimientos de los ojos, por lo que pudieron saber qué dados miraron los voluntarios y durante cuánto tiempo compararon el número de puntos.
La conclusión es clara: las personas mienten cuando mentir conlleva algún beneficio y cuando la mentira se puede justificar desde un punto de vista moral. La complejidad de la vida y la moral, según los científicos, se basa en la ambigüedad de las situaciones que pueden reportar beneficios, lo cual influye directamente en la toma de decisiones.
Fuente: RT