martes, 21 de julio de 2015

Congresistas dicen que embajada en Washington será sede de espías cubanos


La embajada de Cuba en Washington será una sede de espionaje del gobierno castrista y representa un riesgo para la seguridad nacional de Estados Unidos, dijeron el lunes en Miami los congresistas Ileana Ros-Lehtinen, Mario Díaz-Balart y Carlos Curbelo.

“El gobierno de [Barack] Obama le ha dado una licencia a la dictadura castrista para hacer espionaje en contra de los Estados Unidos y le hace daño a la seguridad de nuestro país”, aseguró Ros-Lehtinen en declaraciones a el Nuevo Herald tras una conferencia de prensa en su oficina de Miami.

“Los hermanos Castro tienen un récord que evidencia claramente cómo espían en contra de los Estados Unidos, y hay personas que están en la cárcel hoy sirviendo términos largos por hacer espionaje a favor de la dictadura”.

El gobierno estadounidense ha expulsado a varios diplomáticos de la isla y ha arrestado a agentes de inteligencia cubanos por actividades de espionaje. Los más notables son el grupo de Los Cinco, miembros de la llamada Red Avispa, que fueron arrestados en 1998 y condenados en Miami por conspiración para espiar y asesinar. Los últimos miembros del grupo fueron liberados de una cárcel federal y enviados a Cuba tras el sorpresivo anuncio de las conversaciones para reanudar relaciones entre los dos países.

En el 2001 el gobierno cubano admitió que los hombres eran espías enviados para infiltrar a grupos del exilio cubano luego de varios atentados con bomba en La Habana. Miembros del grupo infiltraron a la organización Hermanos al Rescate, que volaba avionetas sobre el estrecho de la Florida para rescatar a balseros. Parte de la información que enviaron a Cuba fue utilizada para el derribo de dos avionetas en 1996, incidente en el que murieron cuatro miembros de la organización.

Los congresistas cubanoamericanos, que desde el anuncio de la reanudación de relaciones entre los dos países se han opuesto enérgicamente a la medida, afirmaron una vez mas que harán todo lo que esté en su poder para evitar el levantamiento del embargo económico y la asignación de fondos para una embajada en La Habana.

“Debemos estar claros de que esta embajada no representa al pueblo cubano”, dijo Díaz-Balart. “El pueblo cubano no eligió a los hermanos Castro [como gobernantes] y esa embajada representa un gobierno que por décadas ha reprimido al pueblo”.

Mientras tanto el ex congresista Lincoln Díaz-Balart, hermano de Mario, dijo que las medidas de Obama hacia Cuba “violan el espíritu de la ley” que gobierna el embargo económico de Estados Unidos a la isla.

Díaz-Balart, quien durante su estancia en el Congreso logró la aprobación de proyectos de ley que impusieron condiciones para el levantamiento del embargo, dijo que esos requerimientos no han sido cumplidos.

“Impusimos tres condiciones fundamentales: la liberación de todos los presos políticos, la legalización de todos los partidos políticos, la prensa, sindicatos laborales y la programación de elecciones libres”, declaró. “Al violar el espíritu de la ley el presidente [Obama] le brinda solidaridad al régimen [cubano]”.

Lincoln Díaz-Balart también sugirió que el Papa Francisco cabildearía a favor del levantamiento de sanciones durante su visita a Cuba. “Esa es mi opinión. Espero estar equivocado”, dijo.

Curbelo, por su parte, dijo que mientras en Washington muchos brindaron el lunes por “una nueva era en las relaciones de Estados Unidos y Cuba”, en el sur de Florida “estamos recordando a los verdaderos héroes y víctimas cubanas”.

Los congresistas publicaron además una carta dirigida a la subsecretaria de Estado Roberta Jacobson, quien lideró las negociaciones con Cuba, y al asesor presidencial para temas hemisféricos Ricardo Zúñiga, en la que expresan su oposición a la apertura de embajadas.

Además de los congresistas del sur de Florida, la misiva fue firmada por el senador de Texas, Ted Cruz, y el congresista de Nueva Jersey, Albio Sires.

Fuente: El Nuevo Herald